domingo, 2 de diciembre de 2012

fin

El día que yo me vaya, dijo el viejo, me dejaré un grifo abierto para que se me inunde la casa. Así alguien se dará cuenta de que me pasó algo y vendrá a sacar mi cuerpo antes de que se corrompa. No quiero que me encuentren tres meses más tarde y que nadie me reconozca.

Cuando ya no esté, las violetas que tengo allí junto al fregadero terminarán por morirse también, poco a poco. Primero se pondrán oscuras, luego se les secarán los tallos y al final se doblarán como si les pesara la vida. Y allí se quedarán por muchos meses.

Los gorriones acabarán invadiendo la terraza. Se posarán por cientos en la barandilla a ver cómo pasa el panadero por la mañana temprano, cómo la gente llega tarde al trabajo y cómo juegan los niños en el patio del colegio, y más tarde, en el otoño, cuando lleguen las nubes, se quedarán allí muy quietos hasta que caiga la primera gota de lluvia, y entonces se recogerán antes que el Sol.

Cuando yo ya no esté, la hierba del parque seguirá creciendo y el Sol seguirá saliendo todos los días. Los jóvenes se enamorarán por primera vez y se sentirán terriblemente solos cada cierto tiempo. Los gatos saldrán a cazar cuando las sombras les brinden un escondite. Los mendigos seguirán pasando hambre.

El día que ya no esté, las campanas de la iglesia tocarán cada hora y con el ritmo acostumbrado. El sacerdote nos dirá lo indignos que somos, o que fuimos, y todo el mundo se golpeará el pecho. Después hablará de vida eterna y mi cuerpo vacío lo escuchará desde la cama, con la boca abierta y los ojos cerrados.

Todo seguirá como de costumbre, como si nada hubiera pasado. Y eso, para ser honesto, es lo que me da más miedo de la muerte.

12 comentarios:

  1. Arrebatador. Tanta belleza... ¿me invitas a una copa de tu nostalgia? Prometo corresponderte con conversación, no se si buena, pero conversación.
    Besazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Al final la nostalgia es el recurso para los pocos que conservan la memoria. Todo lo demás se olvida o no es lo suficientemente valioso.
      Tú siempre eres bienvenida, es un placer tenerte rondando por aquí.

      Eliminar
  2. Joder, cuñao, estás sembrao últimamente... Mis felicitaciones.

    La verdad es que cuando yo me vaya, quiero que me disequen y me cuelguen detrás de una puerta, con un resorte que funcione para que cada vez que se abra, se abalance mi cadáver al tiempo que se escuche un chillido de loca.

    Pero seguro que eso ya te lo imaginabas...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me imaginaba eso y cosas peores XD Muchas gracias, tío, me alegro de que te guste.

      Eliminar
    2. El miedo que me da, es que cuando seas feliz al 200%, lo mismo dejas de escribir tan bonito.

      ¿Quieres que cuando llegue ese momento te putee para que no sufra minuscabo alguno tu talento artístico?

      Eliminar
    3. Bueno, siempre lo he dicho, si llega ese momento es bastante probable que tenga que dejar de escribir. Por suerte para los que os gustan las cosillas que escribo, nunca he sido una persona muy alegre, así que puede que haya entradas para largo XD

      Eliminar
  3. o quizá encuentres cosas diferentes sobre las que escribir, eso se verá en su momento.

    Siempre me ha resultado curioso que la gente tiene miedo de morir olvidados, de no dejar huella y que la gente no los recuerde mañana... yo siempre he pensado que es muchísimo más importante ser recordados mientras vivimos. Luego... ¿qué más da?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No sé, para mí escribir es una especie de exorcismo, no sé si sería capaz de escribir algo alegre, creo que no tendría sentido. Nunca me gustaron las historias que acaban bien.

      El miedo a morir olvidados es un poco irracional, porque es lo que tú dices, una vez muerto te va a dar igual, pero supongo que a uno le gustaría dejar una parte de sí mismo en la Tierra para no morir del todo. Quizá un invento, un libro, una canción,... Muchas veces también he oído decir que los hijos son una extensión de uno mismo, como una forma de seguir viviendo después de muerto. Personalmente no me parece una opción muy atractiva.

      Eliminar
  4. No tiene por qué ser algo alegre, hay inquietudes, cosas que compartir, vivencias, anécdotas...

    ¿te refieres a algo así como un cerebro tierno del que alimentarse cuando te levantes ahí to zombie de tu tumba y llegues a casa cansado tras un árduo día y con ganas de cenar antes de irte a la cama?

    ResponderEliminar
  5. Buenas,

    Nos gustaria invitarte a unirte a nuestro proyecto de literatura. Se llama Publize.com y es una red social para amantes de la literatura, en la que los escritores pueden darse a conocer o difundir su obra y los lectores encontrar cualquier tipo de lectura.

    Te animamos a probarlo. Puedes darte de alta en www.publize.com, donde también podrás encontrar información. No hay que pagar nada ni dar tu cuenta ni nada por el estilo ;)

    Saludos

    ResponderEliminar
  6. Te prohibo que te vayas. He dicho.

    XD Besito!!

    ResponderEliminar